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Eleva el pensamiento estratégico de forma sorprendente

Los líderes emergentes de las nuevas generaciones son un grupo tecnológicamente avanzado. Muchos tienen títulos modernos, altas habilidades y cuentan con una gran cantidad de conocimientos específicos de la industria actual.

Si bien es cierto que las corporaciones pueden beneficiarse enormemente de esta generación; a estos nuevos líderes no se les puede enseñar a través de métodos tradicionales de capacitación.

Ellos se benefician más de la práctica en la formación aplicable y personalizada, adaptada a sus perspectivas y conjuntos de habilidades.

¿Qué necesitarán los líderes del mañana, de la formación que tienen los colaboradores corporativos de hoy?

Ante todo, debes conocer que el pensamiento estratégico es un proceso de reflexión intencional y racional que conduce a un conjunto claro de objetivos, planes, nuevas ideas necesarias para sobrevivir y prosperar en un entorno competitivo y cambiante.

Este proceso requiere investigación, pensamiento analítico, innovación, habilidades para resolver problemas, habilidades de comunicación y liderazgo.

Ahora que hemos dado por hecho que la próxima generación de líderes estará ocupando grandes puestos de liderazgo, es hora que consideres darles hoy lo que ellos y la corporación necesitan para sobresalir en el entorno laboral del mañana.

Podrás lograr el éxito utilizando las siguientes cuatro técnicas:

  • Formación o desarrollo práctico

En esta era de constantes avances tecnológicos, los estudiantes de hoy necesitan una formación altamente aplicable y adaptada al competitivo mundo digital.

Debido a esto, la formación en pensamiento estratégico debe renovarse por completo y adaptarse a las tendencias que lejos de dejar de ser vigentes, cada día dominan el mercado comercial, como por ejemplo el e-commerce.

Por tal motivo, las formaciones corporativas deben estar orientadas en impulsar el desarrollo de ideas estratégicas que logren que los productos y servicios se vendan mejor, compensen las demandas del mercado y logren satisfacer tanto a proveedores como a clientes.

En ese sentido, el pensamiento estratégico es plantear problemas, analizar los medios con los que se cuentan para solucionarlos, trazar objetivos y/o modificarlos a fin de responder a las circunstancias cambiantes del entorno.

  • Aprendizaje experiencial

Los juegos de simulación empresarial constituyen un recurso valioso para el aprendizaje, puesto que los estudiantes pueden administrar empresas ficticias, lo que les brinda un espacio libre de riesgos para aplicar sus habilidades.

Son modelos especialmente diseñados en los que los aprendices pueden asumir roles, tomar decisiones clave para toda la corporación y observar cómo las decisiones efectivas basadas en el pensamiento estratégico impactan a la empresa a corto como a largo plazo.

Se ha demostrado que el aprendizaje experiencial es más eficaz que otros tipos de formación en muchas áreas. Las simulaciones de casos empresariales, permiten a los colaboradores aprender experimentando las consecuencias de sus acciones y repitiendo diferentes estrategias para ver diferentes resultados.

  • Capacitación con tecnología

Las técnicas de formación del siglo XX han quedado obsoletas debido a los avances tecnológicos actuales. Los días en que los facilitadores sólo usaban métodos de lectura han quedado atrás.

Los líderes emergentes de hoy en día se entusiasman con los recursos digitales y su uso en la capacitación del pensamiento estratégico hará que el proceso sea efectivo y más emocionante.

  • Habilidades altamente aplicables

La fuerza laboral de hoy necesita habilidades que sean altamente aplicables a sus responsabilidades actuales y futuras. Muchas empresas cometen el error de capacitar a los colaboradores solo para desarrollar las competencias necesarias para su cargo y lo que deben resolver en el momento, sin una mirada estratégica hacia el futuro.

En ese sentido, la mejor estrategia es exponer a los líderes a planteamientos que se puedan utilizar hoy pero que también sean muy aplicables en el mañana.

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Es común ver que los empleados mayores a veces encuentran difícil trabajar con los líderes emergentes, debido a su poca capacidad de atención y su dependencia excesiva los entornos digitales. La capacitación basada en el pensamiento estratégico puede ayudar a cerrar esta brecha.

Utiliza la tecnología, el aprendizaje experiencial y formaciones prácticas, aplicables al entorno laboral del siglo XXI. Proporciona las habilidades y el conocimiento que los líderes del mañana necesitan para facilitar la gestión adecuada de las corporaciones.

De esta manera, por ejemplo, lograrás impulsar la productividad de los colaboradores, aumentar la entrega de productos y servicios de tu empresa, aumentar la satisfacción de los clientes y proveedores, entre otros. El resultado será una mayor integración de los líderes del mañana en la fuerza laboral, lo que conducirá a mayores ventas y mayores ganancias.